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Descubre cómo hacer arroz blanco con 5 secretos para que te quede esponjoso, bien cocido y no se pegue
Hay comidas esenciales de toda cocina. Una de ellas es el arroz blanco, que como aperitivo o acompañamiento probablemente ocupa un lugar en tu menú semanal. Sin embargo, hacer arroz blanco, si bien es sencillo tiene sus secretos. Descubre cómo hacer arroz blanco para que no se pegue, te quede esponjoso y con sabor auténtico cada vez que lo cocines.
La medida justa
¿Cuántas veces cocinaste arroz y te sobró como para otras dos comidas? Por eso te damos la medida justa: ¼ de taza de arroz crudo por persona. Puede parecerte poco, solo recuerda que el arroz va a absorber agua durante su cocción y a triplicar su tamaño. Así que esta medida es la correcta.
Sofríe
Antes de cocinar el arroz en el agua añade este paso: sofríe el arroz brevemente en el aceite de tu preferencia. ¿Por qué? Ayudará a sellar el grano para que no desprenda mucho almidón durante su cocción y evitará que el arroz se pegue.
Agua vs. arroz
Así como en un laboratorio, en la cocina también hay fórmulas. Y para cocinar el arroz en su punto la fórmula es: una medida de arroz y dos de agua. Te quedará bien cocido y hasta puede que no necesites colarlo porque el agua se evaporará totalmente. Un tip: agrégale Knorr® Caldo con Sabor de Pollo al agua si vas a hacer arroz blanco o Knorr® Mi Arroz™ Sazonador para Arroz Rojo, si haces arroz a la mexicana. Resaltará el sabor del arroz y te quedará bien delicioso.
La temperatura
Este paso requiere de tu paciencia. Porque la clave es echar el arroz justo cuando el agua comienza a hervir, es decir cuando hace burbujitas. Luego lo remueves y bajas el fuego a temperatura media para que se cocine. Un tip: ¿Cómo hacer arroz blanco que no se pega? Evita remover el arroz durante su cocción, cuanto menos lo hagas menos almidón soltará, lo que ayuda a que no se pegue a la olla o sartén.
Cocina
El arroz puede tardar entre 15 y 20 minutos en cocinar. Una vez que veas que tiene poquita agua en el fondo de la olla o sartén, apaga el fuego, tapa y deja reposar unos 5 minutos. ¿El resultado? Arroz ni muy duro ni muy blando, justo ‘al dente’ y listo para disfrutar.
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